El teatro

E  l inconformismo creciente de los últimos años del siglo, llevó al abandono del teatro realista y a la búsqueda de nuevos planteamientos. El seguro mundo burgués dejó la escena y nos presentó otro repleto de inseguridades y en constante transformación donde la incertidumbre, lo eventual y lo inestable estaba presente. Texto dramático y autor han ido cayendo en importancia y a favor del director, del actor o del decorado. A veces y buscando un acercamiento al pueblo, el teatro salió a las calles o a la fábrica. El teatro pánico de Fernando Arrabal, uno de sus fundadores y que igual que el dios Pan, con personajes neuróticos que se mueven en cualquier espacio, pretende hacer reir y a la vez causar pavor.
Decía Cesar Luis Menotti:-”debemos devolverle el fútbol al aficionado”-. En referencia clara al proceso regresivo que enfermiza el fútbol, con la entrada de gentes adineradas que convierten en negocio y mercancía todo lo que genera este deporte.
En España se habla de la liga bipolar… el presidente sevillista Del Nido abogaba por una liga de dieciocho equipos. Es posible que la frase recogida en el diario deportivo AS, sería una pregunta propia para tanto despropósito: -¿Hay que conjugar en el futbol los versos de la crisis? No hay que ser muy avispado para deletrear los cientos de millones que se abonan por jugadores de otras ligas. ¿Qué impediría a Holanda, Bélgica o Dinamarca hacerse con la mejor liga del mundo? En estos países viven la pasión del fútbol con los jugadores que se forman en sus canteras. Incluso la potente Alemania sopesa los fichajes y el dinero a abonar. Italia ha sufrido un recorte en sus títulos logrados y donde no fichan con la celeridad de hace unos años. Ahí quedan España e Inglaterra. La crisis española está verificada y no parece que a los equipos grandes les importe conjugar el verbo.
No es de extrañar  que los aficionados ceutíes que acuden regularmente al estadio para ver jugar a la AD. Ceuta, lo hagan con la convicción de que un año suene la flauta y el equipo logre sus objetivos. Puede ser que no les importe ver jugar a un equipo de jugadores foráneos. Es factible que acepten la cesión de Jesús Villatoro al CD. Badajoz para que el jugador crezca. Y es comprensible que muchos, en su error, sigan creyendo que en Ceuta no hay jugadores.
Es patético y cercano al mencionado teatro pánico que, continuadamente, las diferentes directivas sigan tropezando en la misma piedra, ante la creencia imbuida por algunos cerebros iluminados. Aquellos catalogados como los únicos que pueden ascender o son los únicos que pueden traer buen fútbol a la ciudad. Tenemos teatro de pasado, presente y …
Cuando la nueva temporada está en sus inicios, la AD. Ceuta va a celebrar una asamblea, al parecer,  para socios y abonados. Creo que la misma carece de interés, principalmente porque la temporada ha sido nefasta.
También es cierto que se produce demasiado tarde. En un proyecto para dos años, el equipo es realmente nuevo… supuestamente, el equipo no va a entrenar en Ceuta. ¿Es ésta una de las mejores maneras de formar un conjunto?
Quien calibra estar dando con la clave es el Murallas. En silencio y formando fisicamente a sus jugadores, se está nutriendo de jóvenes con proyección ayudados con tres o cuatro jugadores veteranos que, seguramente, darán muchas satisfacciones a los aficionados ceutíes. El simple hecho de ver progresar a jugadores con ambición y dedicación, será suficiente para que el equipo se vea arropado. No hay duda, el futuro está ahí…
Por ello, no estaría mal solicitar a Susana Román y Guillermo Martínez que abanderen en la medida de lo posible este proyecto, que es el verdadero para el futuro de nuestros jugadores… que no se aburran como muchos de nosotros… Viendo, como si de un teatro se tratara, la obra que se repite año tras año y que nos acerca, sin solución de continuidad, a la obra de Arrabal “Como un paraíso de locos”.