Desde primera hora de la mañana decenas de niños de la barriada acompañados de sus madres y padres, esperaban la entrega de premios de un concurso de fotografía muy especial en el que reflejaban su barriada.
También hubo reparto de premios de los ganadores de los juegos de mesa que durante meses participaron en un torneo en el que no estaban permitidas las consolas y los videojuegos sino los cubiletes para los dados y las fichas. Desde que la Consejería de Asuntos Sociales puso en marcha una unidad de Trabajo Social en la barriada la respuesta ha sido excelente.
“Es un vecindario excelente que se ha vuelto conformista en cuanto a recursos materiales pero en lo que respecta a la formación, no dejan pasar la oportunidad de mejorar y t anto jóvenes como adultos se implican en todos los talleres y propuestas que les planteamos”, explica Auicha, la integradora social que trabaja junto a Esperanza y un equipo de profesionales en hacer realidad una propuesta que se inició el pasado mes de septiembre y que tiene por objetivo la dinamización de la zona. “Nos están enseñando muchísimo, que son vecinos que se vuelcan, que participan y que quieren aprender”, explican. Junto a ellas, la responsable de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, junto a su segunda de a bordo, Fina Castillo, implicadas en el progreso social de la zona, pese a la limitación de espacios con los que se cuenta. “La Asociación Cultural y el colegio nos ceden estos espacios, pero lo ideal sería contar con un pequeño polifuncional porque aquí la participación y el interés son muy altos”, explican.
Fue hace ya tres años cuando comenzaron a trabajar en la barriada y Asuntos Sociales pretende continuar e incluso incrementar las actividades del programa de dinamización planteado. “Que sean los propios vecinos los que demanden las actividades que más les interesan”, explica Castillo al lado de la consejera, que ha dicho que hara todo lo que esté en su mano para incrementar las dotaciones en la barriada y agradece tanto a la Asociación Cultural como al colegio la cesión de espacios para desarrollar los programas. “Estamos muy contentos y aprendemos muchas cosas”, explican los niños mientras observan la exposición de fotografías que adorna las paredes de los bajos de la mezquita. “Se ha hecho con un doble objetivo: mostrar una barriada tal y como la ven sus vecinos y darla a conocer, además de denunciar las irregularidades que existen en la misma”. Hacen falta muchas cosas, pero lo principal, las ganas de mejorar del vecindario, existe.
Los ganadores del campeonato organizado de juegos de mesa
Entre los talleres que se imparten, uno de los que acapara más participación es el de los juegos de mesa. parchís, oca... “se trata de que no se pierdan ese tipo de entretenimientos de toda la vida”, explica la animadora sociocultural, Esperanza Navarro, recordando que además el próximo martes acudirán todos al Parque Marítimo a pasar el día. En las fotos, Nawal, Mohamed y Alí, aunque falta Kamar cuyo padre acudió a recoger la copa. Entre los programas de intervención comunitaria destaca la iniciativa de crear un equipo de fútbol-7, así como el concurso de fotografía desarrollado. Desde Asuntos Sociales se ha insistido en la necesidad de incrementar los recursEntre los talleres que se imparten, uno de los que acapara más participación es el de los juegos de mesa. parchís, oca... “se trata de que no se pierdan ese tipo de entretenimientos de toda la vida”, explica la animadora sociocultural, Esperanza Navarro, recordando que además el próximo martes acudirán todos al Parque Marítimo a pasar el día. En las fotos, Nawal, Mohamed y Alí, aunque falta Kamar cuyo padre acudió a recoger la copa. Entre los programas de intervención comunitaria destaca la iniciativa de crear un equipo de fútbol-7, así como el concurso de fotografía desarrollado. Desde Asuntos Sociales se ha insistido en la necesidad de incrementar los recursos en la barriada ya que siempre se tienen que trasladar a diversos lugares.