El portavoz en temas económicos por parte de Caballas, Juan Luis Aróstegui, explicó en el pleno de refinanciación de la deuda del crédito utilizado para el pago a proveedores que en su momento no se asumieron responsabilidades por parte de los responsables económicos de la Ciudad y que se habían utilizado esos dineros para “blanquear prácticas corruptas de la casta”.
Desde su punto de vista se había producido una prevaricación continuada. Denunció que si por parte del Gobierno de Mariano Rajoy no se hubiera puesto en marcha esa posibilidad extraordinaria para que las administraciones, tanto las locales como las autonómicas, se acogieran a las solicitudes de préstamo, “en el caso de Ceuta hubiera sido imposible poder abonarlo porque el agujero sería muy importante”. Además ya indicó que pagar muchos millones a las entidades bancarias porque se han visto en la obligación de pedir un préstamo, en sí mismo ya es un drama.
En una segunda intervención alegó que cuando los ciudadanos no pagan sus facturas, al “final terminan embargados, pero cuando los políticos no cumplen con sus obligaciones, no pasa nada, se formula una nueva ley como ésta de pago a proveedores, se abonan y no hay responsabilidades”.
Le señaló a Carreira que no habla tanto de pequeñas y medianas empresas porque en realidad la gran parte del crédito destinado a los proveedores fueron para las grandes empresas de este país. Señaló que, desde su punto de vista, era una política equivocada y contraria a los intereses generales “porque hoy estamos pagando los gastos de cuatro, cinco y seis años”.
Culpó al equipo de gobierno de que el margen de maniobrabilidad dentro de los presupuestos con la deuda tan alta que tiene la Ciudad Autónoma es “muy estrecho, porque aquí se ha gastado sin control y además han conseguido una ciudad fragmentada en dos mitades en solamente diecinueve kilómetros cuadrados”.