La reanudación del porteo sin previo aviso ha cogido desprevenida a toda la ciudad.
Después de una semana de veto al paso de mercancías por la frontera del Tarajal debido a la presión migratoria, las colas de coches-patera han regresado este miércoles trayendo consigo el colapso.
Los servicios públicos han quedado atrapados, como son los autobuses y los taxis.
Pero las retenciones han bloqueado también a esta ambulancia. Sin posibilidad de avanzar hasta el lugar de la incidencia, los pacientes han tenido que esperar la llegada del vehículo sanitario retenido por la acumulación de coches.
Las filas abarrotan ya la carretera de la frontera, la subida al Príncipe Felipe, al Hospital Universitario y llegan hasta la barriada de Miramar.
La reapertura de la frontera y del ‘Tarajal II’, programada para este jueves, se ha adelantado un día porque la Delegación del Gobierno y las autoridades marroquíes lo han decido a última hora.