Al borde de la insolación. Durante horas, atrapados en las colas hacia la frontera. Sin abandonar el coche por miedo a que el tráfico avance, sin un lugar cercano donde comprar agua o resguardarse del sol.
Son tanto familias de viaje para pasar sus vacaciones de verano como conductores dedicados al transporte de mercancías.
Personas con distintos intereses, pero un destino común: Marruecos, país soberano que hoy ha vuelto a ralentizar el tránsito por la frontera debido a los controles exhaustivos, como insiste la Delegación del Gobierno.
Los pasajeros de la Operación Paso del Estrecho que han desembarcado este miércoles en Ceuta se han topado con las mismas retenciones y esperas que sus predecesores. Todos arrepentidos de haber elegido la línea marítima con la ciudad autónoma.
En definitiva, malas experiencias donde, han asegurado, han tenido incluso encontronazos con las fuerzas de seguridad.
Los ceutíes también se están viendo afectados por unas retenciones que han encarcelado a los vecinos de Loma Colmenar y han aislado al Hospital Universitario.
Las medidas de las autoridades llegan tarde porque las colas de la frontera se han convertido ya en parte del paisaje y, tristemente, hasta en un reclamo turístico.
Si se impide la entrada de los coches pateras a Ceuta se quejan los comerciantes. Si se dejan entrar los coches pateras se producen retenciones y quejas de los ciudadanos ¡Pues dejamos entrar coches pateras que los comerciantes aportan más que los ciudadanos de a pie!
Eso merece un aplauso. Sacrificar el bienestar general con la consiguiente perdida de derechos. Lo suyo sería buscar alguna solución menos drástica. La comunicación con el país vecino y los acuerdos, el posible paso por Benzú en situaciones difíciles, la utilización de lugares públicos para el almacenamiento de vehículos, como la explanada del puerto y no la del chorrillo, etc.. Para todo ello tenemos unos políticos que deben de velar por que no se produzcan menoscabo de las condiciones de bienestar de la población, los técnicos de la administración y los asesores.