La N-352 sigue colapsada por segundo día consecutivo, aunque las colas no llegaban hasta la altura de la playa del Chorrillo, sino que se quedaba a la altura de la curva de Juan XXIII. Las razones de la menor presión se debe a que Marruecos abrió antes para el paso de los vehículos patera. Sin embargo, alrededor de las diez de la noche todavía quedaban automóviles, alrededor de treinta, en la explanada de Juan XXIII.
La Policía Local volvió a repetir la misma operación del lunes. Eliminó los vehículos que esperaban para incorporarse a la cola a la altura de la bajada del Jato y del Hospital Universitario para que el acceso de los automóviles que quisieran dirigirse al centro estuviera libre.
Los ocupantes de los vehículos patera llevan desde el mediodía esperando en la cola. Se lo toman con filosofía porque están acostumbrados a esperar largas horas.