La familia de la Policía Local celebró ayer San Urbano, su Patrón. Un solemne acto en el Salón del Trono del Ayuntamiento fue para más de una treintena de agentes un día muy especial por el reconocimiento que recibieron de las primeras autoridades locales. Pero la felicitación es extensiva a toda la plantilla del Cuerpo que cada día trabaja en las calles cumpliendo con su deber, velando por el cumplimiento de la ley y por la seguridad de los ceutíes. Así lo destacaron tanto el superintendente de la Policía Local, Sebastián Vega, y el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, que coincidieron en destacar la buena labor que se está desarrollando a todos los niveles, aunque sin caer en la autocomplacencia. Vivas reclamó seguir la senda de la cooperación y colaboración entre Fuerzas de Seguridad en nuestra ciudad sin caer en “rivalidades absurdas”, mientras que el superintendente remarcó la importancia de dar respuestas ágiles ante una realidad ceutí que cambia rápidamente y la mayor exigencia de la ciudadanía. Vega no desaprovechó la ocasión para poner el punto reivindicativo y lanzar el guante al consejero de Gobernación, Jacob Hachuel. Le reclamó un esfuerzo económico en breve tiempo para la mejora de las instalaciones en la Comisaría, especialmente, en el área de custodia de armamento y la sala de comunicaciones.