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El grupo de teatro representará esta comedia de enredo el viernes 3 de febrero en el Auditorio a las 21.00 horas
El grupo de teatro ‘ConMedia Farsa’ hace su estreno de este año en el Auditorio del Revellín con una nueva comedia de enredo que representará el viernes 3 de febrero a las 21.00 horas. Las entradas ya están disponibles a través de los canales habituales: la web de la ciudad, la del propio teatro o en taquilla del Revellín. Y el precio oscila entre los 4 y los 6 euros.
El grupo de comediantes presenta la obra ‘No te vistas para cenar’, una comedia de enredo en la mejor tradición de vodevil contemporáneo. El argumento de la misma gira entorno a Fernando, quien aprovechando que su mujer Irene tiene que ir a visitar a su madre, invita a su amante, Susana a pasar el fin de semana con él, y también a un amigo suyo, Antonio, para tener una coartada. Todo es perfecto, incluso ha contratado una cocinera Susy para que no les falte de nada. Pero las cosas no le salen como él espera y la velada romántica se acaba convirtiendo en una noche muy movidita en la que todos fingen ser lo que no son para evitar ser descubiertos.
La comedia de enredo es un género realmente difícil, ya que exige dos cosas importantes: una historia compleja y bien urdida llena del mayor número posible de confusiones y malentendidos, y por otro lado los actores han de tener una gran vis cómica. En ‘No te vistas para cenar’ confluyen ambos elementos, lo que la convierte en la elección ideal para pasar un rato verdaderamente divertido en el que te olvidas de todo y las carcajadas son continuas.
Esta disparatada y divertida comedia de enredo, del suizo Marc Camoletti se estrenó Lyon en 1987 con el título ‘Pyjamas Pour Si’ (pijama para seis), la obra tuvo posteriores reescrituras, hasta llegar a la versión actual, que se estrenó en el teatro Apolo de Londres el 20 de marzo de 1991, en 2012 llegó a Broadway y en 2013 al Rialto de Madrid
La historia gira en torno al amor, los celos, la confianza, la mentira, la infidelidad, la amistad, la discreción… es, por tanto, una comedia que abarca mucho más de lo que a primera vista pueda parecer. El ritmo es trepidante, no se da un minuto de respiro al público. Los personajes no paran de entrar y salir y complicar cada vez más la situación, que en algún momento llega a ser rocambolesca. Sin embargo, tampoco es que suceda nada que sea del todo inverosímil, la realidad a menudo supera a la ficción y seguro que más de uno ha vivido situaciones así de comprometidas y se siente identificado con la representación.
Además de lo enrevesado del argumento, el mayor mérito quizá estriba en que el autor consigue encajarlo todo al final sin dejar ningún cabo suelto, cosa que no resultaba nada fácil viendo hasta donde puede llegar el número de equívocos y engaños a lo largo de la obra. Al final el círculo se cierra y el espectador acaba satisfecho.