Dejar patente la importancia de los idiomas, y en especial de las lenguas maternas como tesoro cultural propio, cuyo uso aumenta la calidad de la educación y mejora las capacidades de comprensión y creatividad.
Ese es el objetivo que persigue el Día de las Lenguas Maternas, que ayer cumplió su VIII edición en la ciudad.
Esta mañana se ha celebrado la segunda sesión de la actividad a la que han asistido los centros Beatriz de Silva, Rosalía de Castro y Mare Nostrum. Los estudiantes han participado en talleres que abarcan las cuatro lenguas de las comunidades existentes en la ciudad.
Las actividades buscan potenciar el valor de las lenguas entre los niños como patrimonio inmaterial de la ciudad y fomentar y favorecer el conocimiento de las mismas.