De entrada, son unos presupuestos que como reconocía ayer la consejera de Hacienda podrán tener un expediente de modificación de crédito en cuanto que el Gobierno central apruebe sus cuentas públicas tanto en el Congreso como en el Senado. De todas maneras, ya ha conseguido dar unas primeras pinceladas la responsable del área al indicar que las dos principales prioridades de cara al próximo ejercicio económico serán los gastos sociales y los servicios públicos. En el apartado de gastos sociales se incrementarán partidas destinadas a la Consejería de Asuntos Sociales, mientras que en el caso de los servicios públicos hay un apartado muy importante que dependerá de la Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad. Estamos hablando de proyectos ya conocidos como la mejora de las playas, el segundo contrato de la limpieza o las nuevas luminarias. Trabajos que supondrán un buen número de millones de euros.
A pesar de todo ello, está claro que la salud financiera de la Ciudad Autónoma sigue siendo buena y las perspectivas que existen a medio y largo plazo lo confirman. La deuda se siguen pagando y se está llegando a las cifras que los expertos consideran como una deuda sostenible y razonable. Se ha vuelto a repetir que el Plan de Barriadas será la joya del Plan de Inversiones. Un Plan de Inversiones que se preparó al comienzo de la legislatura, pero que todavía no ha comenzado a arrancar. Se confía que los primeros meses del próximo año sean claves para los primeros proyectos de este Plan de Barriadas.