La rectora de la UGR, Pilar Aranda, anunció ayer que Ceuta contará con un centro de investigación científica pues se cuenta con un presupuesto de 377.000 euros para acometer este importante proyecto que, no hay duda, de que redundará en un beneficio directo para la ciudad y la comunidad universitaria. Una buena noticia para Ceuta que, de materializarse, daríamos un salto cualitativo. Pero aún queda tiempo para ver si este ambicioso proyecto prospera. Primeramente porque se necesitan infraestructuras y segundo, porque, tal y como apuntó Aranda, se necesita de un esfuerzo presupuestario del Ministerio para que la UGR pueda seguir persiguiendo esos ambiciosos objetivos que tiene para su Campus caballa. El Gobierno en funciones no puede prometer mucho hasta que el nuevo Ejecutivo se constituya y se definan de una vez unos Presupuestos estatales para el próximo ejercicio.
Es bueno para la ciudad que se potencie la investigación así como toda iniciativa relacionada con nuestra universidad, pero teniendo en cuenta el alto índice de fracaso escolar que tenemos en Ceuta, cabe plantearse que ese mismo esfuerzo inversor se traduzca también en las primeras etapas educativas. De lo contrario, si nuestros jóvenes abandonan antes el sistema educativo no llegarán a saborear esas mieles universitarias que ayer nos pusieron en los labios.