El proceso judicial se encuentra a la espera de que se configure el jurado popular que el abogado del joven pidió. El Fiscal todavía no ha calificado los hechos.
La defensa del joven Ángel J.P.G., autor confeso del homicidio de su padrastro, ha solicitado que se le practique un examen psicológico al muchacho para determinar si en el momento de los hechos éste padecía algún tipo de problema psíquico que limitara sus capacidades intelecto-volitivas. En el caso de que el médico determinase que sí tenía una enfermedad mental el joven podría verse beneficiado por la aplicación de una circunstancia atenuante, que supondría la rebaja de la pena a la que se enfrenta. En principio, aunque el Fiscal todavía no ha calificado los hechos, se especula con que llegue a juicio por homicidio. El joven se enfrentaría entonces a una pena de entre diez y quince años de prisión. Por otra parte, la defensa está pendiente de que se configure el jurado popular que solicitaron para el juicio y de que se fije una fecha para su celebración definitiva.
El joven esperó a su padrastro
Según se supo en su momento, el homicidio se produjo sobre las 3.00 horas del día 26 de mayo del año 2010. A esa hora el chico se introdujo sigilosamente en la casa utilizando su llave. Entró por la puerta trasera del número dos de San Amaro. A oscuras, en el pasillo del domicilio, Ángel J.P.G. se mantuvo a la espera de su víctima con un cuchillo jamonero de 25 centímetros. Estaba esperando el mejor momento para asestar una puñalada a su padrastro y éste llegó en mitad de la noche. La Policía localizó el arma en el escenario del suceso. Horas más tarde, sobre las 7.40 horas, el muchacho fue localizado en la pensión ‘El Cateto’, situada en el Recinto Sur, donde fue detenido.