El ministro de Educación puso las cartas sobre la mesa y trajo desde Madrid los compromisos que los ciudadanos querían escuchar, pero también tuvo que comprometerse con la educación ceutí en la ejecución de 20 unidades docentes para el próximo año repartidas entre los centros con más carencias en infraestructuras. Fue la propuesta planteada por la Dirección Provincial del ME ante las necesidades que sufren los colegios. La petición queda en el aire a expensas de la decisión estatal. Sólo cabe esperar que no caiga en saco roto esta demanda local. Las prisas no son buenas compañeras, pero tampoco lo es la aglomeración de estudiantes en aulas y el ministro debe haber tomado buena cuenta de las carencias. Con voluntad y con las elecciones a menos de dos años todo es posible, hasta sacar aulas de donde no hay espacio.