Dos coches del garaje situado en Miramar Bajo quedaron muy seriamente dañados a causa de un incendio del que se recibió aviso a las 18.43 horas y que fue controlado a las 19.30 horas. Las causas del incendio se desconocen, y será la unidad de Policía Científica perteneciente al CNP la que realice hoy los estudios pertinentes. Ayer sólo se pudo determinar cuáles eran los vehículos calcinados una vez los efectivo del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento rescataron los restos de las matrículas de los dos turismos más dañados, ambos de modelo Peugeot. Además, será el turno de cuantificar cuáles son los daños en la estructura.
Un zeta de la Policía Local fue la primera unidad que llegó al lugar de los hechos, cuando el fuego se encontraba en sus indicios. Tanto que un agente se adentró en el garaje para intentar localizar el foco de las llamas, algo que resultó imposible debido a la rapidez que mostró el fuego en fortalecerse.
Minutos después llegó hasta Miramar Bajo el cuerpo de Bomberos. Ante el intenso humo tóxico desprendido por los materiales de los coches y del garaje, los bomberos tuvieron dificultades para encontrar el foco del incendio. Finalmente, a oscuras y guiándose únicamente por el calor desprendido (se alcanzó una temperatura de 1.000 grados centígrados), tardaron menos de 15 minutos. Para las 19.30 horas, el fuego ya estaba controlado, habiendo afectado seriamente a sólo dos vehículos, aunque otros muchos presentaban daños de menor intensidad. En la operación participaron 12 bomberos del SEIS, todos los disponibles en la guardia.
Además, también se dio aviso a la Empresa de Alumbrado para que anulara el suministro en el tramo afectado por el incendio, con el fin de evitar la creación de posibles nuevos focos y complicaciones.
La Policía Local y la Guardia Civil se afanaron mientras tanto en desalojar a los vecinos de los cuatro portales del bloque 3 de Miramar Bajo con la ayuda de Cruz Roja. La mayoría ya habían salido, muchos de ellos alertados por una explosión que tuvo lugar en el garaje, pero otros tantos permanecían aún en sus domicilios, en total unas 35 personas. Las autoridades permitieron a los vecinos regresar a sus domicilios a las 20.00 horas, cuando el humo ya estaba casi extinto, gracias a un extractor de los bomberos.
Este mismo garaje también fue escenario de un incendio de similares características el verano pasado, que se debió a un ajuste de cuentas.
Un zeta de la Policía Local fue la primera unidad que llegó al lugar de los hechos, cuando el fuego se encontraba en sus indicios. Tanto que un agente se adentró en el garaje para intentar localizar el foco de las llamas, algo que resultó imposible debido a la rapidez que mostró el fuego en fortalecerse.
Minutos después llegó hasta Miramar Bajo el cuerpo de Bomberos. Ante el intenso humo tóxico desprendido por los materiales de los coches y del garaje, los bomberos tuvieron dificultades para encontrar el foco del incendio. Finalmente, a oscuras y guiándose únicamente por el calor desprendido (se alcanzó una temperatura de 1.000 grados centígrados), tardaron menos de 15 minutos. Para las 19.30 horas, el fuego ya estaba controlado, habiendo afectado seriamente a sólo dos vehículos, aunque otros muchos presentaban daños de menor intensidad. En la operación participaron 12 bomberos del SEIS, todos los disponibles en la guardia.
Además, también se dio aviso a la Empresa de Alumbrado para que anulara el suministro en el tramo afectado por el incendio, con el fin de evitar la creación de posibles nuevos focos y complicaciones.
La Policía Local y la Guardia Civil se afanaron mientras tanto en desalojar a los vecinos de los cuatro portales del bloque 3 de Miramar Bajo con la ayuda de Cruz Roja. La mayoría ya habían salido, muchos de ellos alertados por una explosión que tuvo lugar en el garaje, pero otros tantos permanecían aún en sus domicilios, en total unas 35 personas. Las autoridades permitieron a los vecinos regresar a sus domicilios a las 20.00 horas, cuando el humo ya estaba casi extinto, gracias a un extractor de los bomberos.
Este mismo garaje también fue escenario de un incendio de similares características el verano pasado, que se debió a un ajuste de cuentas.